El "efecto Lutero" recorrió el mundo

Martín Lutero en medio de reformadores. Esta pintura que data de 1625/1650 muestra a los renovadores de la Iglesia en una disputa intelectual con los eruditos. Personajes poderosos observan ansiosos lo que ocurre. El cuadro muestra lo entrelazados que están religión y política.

Eduardo VI (1537-1553) fue el primer rey de Inglaterra que tuvo una educación protestante. Su padre, Enrique VIII, había desligado a la Iglesia inglesa de Roma. Eduardo mandó celebrar los oficios religiosos en inglés, abolió el celibato de los sacerdotes e introdujo el libro de oraciones. Murió con solo 15 años de edad. En la imagen: "El rey Eduardo VI y el Papa".

En Corea, y luego Corea del Sur, ha tenido un boom el protestantismo. Una quinta parte de la población profesa la confesión evangélica, lo cual constituye un récord en el este de Asia. El recurso más importante de los misioneros fue la utilización del alfabeto coreano para la traducción de la Biblia.

"Westward the Course of Empire Takes Its Way", se llama esta pintura de Emanuel Leutze, que se encuentra en el Capitolio, en Washington. Muestra una escena en que colonos atraviesan las Montañas Rocosas. Abajo, una vista panorámica de la bahía de San Francisco. Con los colonos se propagó el credo protestante.

Oración de la mañana en la iglesia luterana Kariakoo en Dar es-Salam, Tanzania. Esta iglesia evangélico-luterana es la mayor del continente africano. Sus carismáticos líderes se consideran representantes de los ideales originales de Lutero.

La Hermandad de Moravia, un movimiento cristiano supraconfesional emanado de la Reforma en Bohemia, ha tenido un rol especial en la propagación del protestantismo en África. Desde Tanzania, sus predicadores emprendieron misiones en todo el continente. En la foto, un cuadro de Johann Valentin Haidt, de 1748.

Otro "efecto Lutero": el protestantismo se abrió paso hasta los más recónditos rincones del norte. La Iglesia cambió la vida de los lugareños en Laponia. Un pintor desconocido plasmó sus impresiones en esta obra de 1668, con un paisaje estival y uno invernal.

El rey sueco Gustavo Adolfo II incursionó en Alemania en la Guerra de los 30 Años, impidiendo así el triunfo del bando imperial de los Habsburgo. Indirectamente aseguró con ello la existencia del protestantismo. El autor de esta obra ensalzó el hecho aproximadamente en 1650 en el cuadro "Apoteosis".

Este mural de seda y lana muestra la vinculación entre la fe luterana y el Estado. El Reichstag sueco aprobó en 1686 una nueva ley eclesiástica que consagró la unión de la Iglesia y el Estado. El luteranismo se convirtió en la Iglesia oficial.