Brasil: ola de calor con temperaturas récord

El ayuntamiento de Río de Janeiro pidió a sus habitantes que se mantuvieran lo más alejados posible del sol y bebieran mucho líquido. En la imagen, varias personas aprovechan la entrada de la noche con un chapuzón en el agua.

Otra ola de calor ya azotó Brasil el pasado mes de noviembre. Entonces se registraron 40 grados, aunque la temperatura percibida fue de 58 grados. El Instituto Nacional de Meteorología clasificó la situación en 15 estados y el distrito federal en torno a la capital, Brasilia, como "muy peligrosa".

Según el servicio meteorológico, el domingo se percibió una temperatura de 62,3 grados en el barrio de Guaratiba, en el oeste de la metrópoli. La temperatura máxima real en Río de Janeiro ese mismo día fue de 42 grados. ¿La mejor opción? Un chapuzón en la piscina.

La temperatura percibida describe la sensación térmica de una persona, algo que depende no sólo de la temperatura real, sino también de factores como la humedad y el viento. En la mundialmente famosa playa de Copacabana, en Río de Janeiro, la gente trata de soportar el intenso calor con juegos y chapuzones.

Las temperaturas también se han disparado en la metrópoli brasileña de São Paulo. Muchos visitantes del popular "Museu Paulista" se refrescan en una de las numerosas fuentes de agua del recinto, pese a los 34 grados centígrados que se perciben en el ambiente.

Los "paulistas", habitantes del estado de São Paulo, se divierten en las numerosas piscinas de la ciudad. Con una temperatura máxima media diaria de 28 grados, São Paulo es una de las regiones más frescas de Brasil.

¡Hasta el presidente se puso a sudar! En una conferencia ministerial, celebrada el pasado lunes en Brasilia, todos vieron que el calor también pasa factura al presidente, Lula da Silva. La buena noticia: a partir de este miércoles, las temperaturas deberían remitir por fin y sería posible que incluso lloviera en los próximos días.